Intervención comunitaria contra la violencia

Descripción general

La intervención comunitaria contra la violencia reduce los daños relacionados con las armas de fuego al abordar las razones subyacentes de la violencia y trabajar con personas y comunidades con mayor riesgo de convertirse en víctimas de actos de violencia o de cometerlos. Los programas de intervención comunitaria contra la violencia utilizan información confiable y mensajeros que inspiren confianza (personas con una identidad, experiencias comunitarias o personales compartidas con la violencia comunitaria) para llegar a las personas con mayor riesgo de violencia o victimización y brindarles servicios de apoyo. Estos mensajeros que inspiran confianza construyen relaciones con las personas y sus familias y les ayudan a acceder a recursos comunitarios que respaldan sus necesidades relacionadas con las circunstancias de la vida, situaciones de vida, comportamientos negativos o desesperanza.

El objetivo de la intervención comunitaria contra la violencia es abordar los factores en las comunidades, los vecindarios y las personas que conducen a la violencia. La intervención comunitaria contra la violencia también tiene como objetivo romper el ciclo de violencia en comunidades con diversidad racial y étnica con ingresos más bajos que históricamente no han recibido suficientes recursos ni apoyo. Las iniciativas de la intervención comunitaria contra la violencia a menudo se centra en los hombres negros y latinos de entre 10 y 24 años, quienes corren el mayor riesgo de resultar heridos o de morir por violencia con armas de fuego. La intervención comunitaria contra la violencia funciona mejor cuando las agencias estatales y municipales colaboran con organizaciones comunitarias para crear y llevar a cabo un plan para reducir la violencia. Esto se denomina “ecosistema de intervención comunitaria contra la violencia”.

Cómo implementar actividades de intervención comunitaria contra la violencia

Identifica a los actores clave en tu comunidad.

• Identifica a las organizaciones y personas en tu comunidad que ya están o podrían estar involucrados en la prestación de servicios de intervención comunitaria contra la violencia a personas con mayor riesgo de violencia o victimización. Estas personas (u organizaciones que emplean a estas personas) deben ser mensajeros que inspiren confianza.
• Si eres parte de una comunidad en la que los servicios de intervención comunitaria contra la violencia no parecen existir, trabaja con organizaciones comunitarias que tengan relaciones preexistentes con personas con mayor riesgo de violencia o victimización para entender quiénes podrían ser mensajeros que inspiren confianza. No comiences este trabajo sin identificar y apoyar a estos mensajeros que inspiran confianza.
• Concientiza a los socios relevantes sobre la importancia de un ecosistema de intervención comunitaria contra la violencia. Las organizaciones que trabajan en la prevención de la violencia, como las organizaciones comunitarias, los departamentos de salud pública locales y los grupos de seguridad vecinal, deben crear e implementar estrategias que aborden las dinámicas únicas que contribuyen a la violencia en tu comunidad.

Proporciona servicios a personas con mayor riesgo de violencia o victimización. 

• Invierte en el desarrollo de capacidades de mensajeros que inspiren confianza y que puedan llegar mejor a las personas con mayor riesgo de violencia o victimización.
• Responde a incidentes de violencia comunitaria, reduce situaciones violentas y ofrece asistencia a las personas y familias afectadas.
  Identifica a las personas con mayor riesgo de violencia o victimización a través de escuelas, iglesias, proveedores de atención médica u otras organizaciones comunitarias y en servicios integrales.
• Colabora con la policía para identificar a personas con antecedentes de delitos violentos para que mensajeros que inspiran confianza puedan brindarles servicios para prevenir la violencia en el futuro.
• Orienta y genera confianza con personas con mayor riesgo de violencia o victimización, con el objetivo de ayudar a cambiar cualquier norma que puedan tener en torno al uso de armas de fuego para resolver conflictos.
• Conecta a las personas con recursos y servicios integrales que puedan mejorar sus circunstancias de vida, como empleo, educación, vivienda, recreación, seguridad alimentaria y oportunidades financieras.
• Modela y crea oportunidades para que las personas en riesgo se conecten y se involucren con tu comunidad, familia y amigos para aumentar su apoyo social y compromiso cívico.
• Capacita a mensajeros que inspiran confianza en modelos de terapia cognitivo-conductual diseñados para el trabajo de intervención comunitaria contra la violencia. Estos enfoques ayudan a las personas a cambiar los pensamientos y emociones negativos para que puedan desarrollar mecanismos de afrontamiento más saludables y mejorar su salud mental.
• Utiliza enfoques sensibles al trauma para garantizar que las personas en situación de riesgo tengan acceso a recursos que respalden una recuperación integral y un proceso de sanación completo.

Aborda los riesgos del vecindario y la comunidad que a menudo contribuyen a que las personas se involucren en violencia comunitaria. 

• Crea comisiones de revisión de homicidios que incluyan a la policía, a los miembros de la comunidad, a los actores del sistema de justicia penal y a los proveedores de servicios para debatir los homicidios y los tiroteos no mortales. El objetivo es identificar patrones y posibles oportunidades de intervención perdidas para luego informar recomendaciones para abordar las condiciones comunitarias subyacentes que aumentan el riesgo de que las personas sufran violencia relacionada con armas de fuego.
• Crea entornos protectores y mejora el entorno construido (como casas, edificios, calles, transporte, parques y espacios abiertos) para mejorar las condiciones de la comunidad donde viven personas con mayor riesgo de violencia o victimización.

Evidencia que respalda las intervenciones comunitarias contra la violencia

Las evaluaciones de las intervenciones contra la violencia comunitaria son limitadas y la investigación está en curso. Sin embargo, los resultados de los estudios disponibles son prometedores y muestran que las iniciativas de las intervenciones comunitarias contra la violencia pueden reducir los homicidios y los tiroteos no mortales, reducir los delitos violentos y reducir los arrestos por delitos violentos y revictimización en comunidades afectadas desproporcionadamente por daños relacionados con armas de fuego. Se están realizando más investigaciones para comprender los componentes centrales de los programas y ecosistemas de intervención comunitaria contra la violencia exitosos y su impacto en los daños relacionados con armas de fuego.